viernes, 10 de diciembre de 2010

Tango y cruz

Este Bolívar amoratado le costó 15 días
de prisión a Jorge Olavarría

La primera imagen que asocio con El último tango en París de Bertolucci (con Marlon Brando y Maria Schneider) es la de una barra de mantequilla. No voy a dar detalles, pero una escena donde Brando y Schneider le daban un uso poco ortodoxo a la mantequilla y otras peripecias eróticas de la pareja sirvieron de excusa para que la película fuera prohibida en Venezuela durante el primer gobierno de Rafael Caldera (1972). Recuerdo las conversaciones de los adultos en mi casa, comentando lo que se decía de la "escandalosa" película, los chistes que se hacían, y la curiosidad que todo esto generó en mí. La película se exhibió en el país unos años después, lo que finalmente permitió que los adultos (debió haber sido censura D) confirmaran con sus propios ojos para qué sirve la mantequilla. 


La Venezuela democrática pre-Chávez (no la llamaré la IV República) tuvo sus casos de censura, prohibiciones, regulaciones absurdas (las limitaciones a las transmisiones de televisión en color, por ejemplo), editores presos y publicaciones recogidas (oficial y oficiosamente). En 1983, el año del Viernes Negro, el editor Jorge Olavarría pasó 15 días preso por orden del Gobernador de Caracas. Su "delito" fue haber publicado en la portada de la revista Resumen un Bolívar con el ojo morado. La imagen se consideró un ultraje a la memoria del Padre de la Patria. En tiempos de Lusinchi se prohibió que circulara un ejemplar de la revista española Cambio 16 donde se relataba las extravagancias de la secretaria privada del presidente Blanca Ibáñez durante una visita de estado en Madrid. A la periodista Rosana Ordoñez la echaron de Radio Caracas Televisión después que hiciera un comentario al aire sobre la que Piñerúa llamó la "barragana" (se dice que en RCTV siguieron instrucciones de Miraflores).


En 1988 la proyección de La última tentación de Cristo de Scorsese causó revuelo en el país (como ocurrió en los Estados Unidos). Grupos católicos conservadores pidieron que se prohibiera la película, lo que no pasó. El largometraje se presentó en muy pocas salas, entre otras en el Ateneo de Caracas. El día que fui a ver la película me conseguí en la cola al Padre José Ignacio Rey, s.j., lo que no me sorprendió para nada conociendo las opiniones y el espíritu combativo de mi profesor de Fenomenología socio-religiosa en la UCAB. Después vendrían el Caracazo y las intentonas golpistas del 92, lo que generó tensiones tremendas entre el gobierno de CAP y los medios, situaciones de censura, y un desbocamiento de periodistas y escribidores, que asumieron el discurso de la antipolítica. A pesar de ciertos altibajos, la libertad de expresión fue en general respetada por el ejecutivo que, entre otras cosas, “soportó” con cierta estoicidad la ácida crítica que todas las noches le hacían en la telenovela Por estas calles.


Hoy estamos ante la posibilidad que el régimen de Chávez apruebe una serie de leyes que quieren controlar lo que se dice en Internet y en las redes sociales. Al mejor estilo del sistema de partido único chino y de la teocracia iraní, el chavismo pretende limitar el acceso y la circulación de información y opinión en el ciberespacio, con la excusa de que busca proteger la moral pública, el honor de las instituciones y de los funcionarios del Estado, especialmente del máximo funcionario, el presidente-comandante. Los casi 12 años de presidencia de Chávez han sido mucho peores para la libertad de expresión que los 40 años de la democracia pre-Chávez. En los últimos días del año 2010, la Asamblea Nacional controlada por una mayoría circunstancial que sigue las órdenes del presidente, está aprobando una serie de leyes que tendrán profundas consecuencias para el futuro inmediato del país. Es posible que la Venezuela que hemos conocido esté cambiando radicalmente. Todo ocurre bajo la sombra de la tragedia ocasionada por las lluvias y la tregua navideña que, con razón, añoran los sufridos venezolanos. 

5 comentarios:

  1. Los directivos de Googleal iniciar sus negociaciones con China manifestaron a vox populi Bussines is bussines ( perdona si lo escribo mal), las Compañías de Salud de USA están en contra de las reformas de Salud de Obama, las viejas cacatuas de la llamada clase media caraqueña están contra las medidas del Gobierno pero piden su 4.30 para vivir en USA y Europa, diría Shakespeare algo podrido huele en Dinarmaca y a que responderàimos mi reino por un caballo... la clase media de este apís dice que no puede hacer nada, la clase pobre, como siempre pone la sangre y la vida... o sea estaos en un circulo de tiza como dirìa Bretch... de miserias humanas, de oortunismo al mejor postor... no nos queda màs que la próxima era glaciar... por eso decidí quedarme a pesar de los pesares...

    ResponderEliminar
  2. Luis:
    Es cierto que el mundo anda "desordenado" y que hay mucho cinismo. Pero lo que está ocurriendo en Venezuela a veces desborda todos los niveles de cinismo y perversión. Aprueban las leyes corriendo para dejarle una camisa de fuerza al país y a la próxima Asamblea Nacional, que es más representativa de la pluralidad de Venezuela.

    ResponderEliminar
  3. ...varias veces pense' que ya habiamos tocado fondo, ahora pienso que como que no existe fondo que tocar...

    ResponderEliminar
  4. Así es mi querida Cheryl, parece que Venezuela es (un barril) sin fondo, porque cada vez vienen cosas peores. Lo más aterrador es la aparente tranquilidad de los venezolanos, no se si la apatía o el miedo, puede ser también una autoestima lastimada y lacerada que no permite mover más de lo que uno mueve. Por ejemplo, la MUD hasta ahora no ha dicho pío...el único pájaro que canta aparentemente es twitter. Gracias Isaac por compartir. Besos

    ResponderEliminar
  5. Durante el segundo gobierno del presidente Caldera, recuerdo que el astrólogo José Bernardo Gómez fue hecho preso y paso una temporada en los calabozos de la extinta Disip porque se atrevió a hacer previsiones sobre la visita de la "pelona" a ese presidente: con esta anécdota quiero indicar que la tolerancia y la libertad fue un hecho que no fue respetado con amplitud antes de Chávez y que se fue creando un hecho cultural de la negación que hoy se ha exacerbado. Mi esperanza es que en la época pos Chávez no cometamos los mismos errores que que en otros tiempos fueron mostrados casi como normales y que hubiesen servido para forjar una cultura más tolerante y no lo que se vive hoy: Bandos comunicacionales de ambas tendencias políticas transmitiendo información de forma sesgada que divide más a la gente.

    ResponderEliminar